miércoles, 4 de mayo de 2011

*[Ya pasó, Marina]*

Estacionada en el andén
sin esperar más que horas
conectada (de oídos) al edén
de mi mundo musical
de amapolas musitadas.
Te escucho entre los versos
de un poema mal cantado
o una canción mal recitada
sin saber si atender a tu llamada,
la de un fantasma transgresor.
Un fantasma sin reglas,
sin existecia ni halo,
sin miedo ni pecado,
pero con olor a lluvia.
El tren parte
entre la niebla y la noche
pero no sabe a novela negra.
Huele a nuevo,
a plástico y gente urbana
que no conocen el significado
de la palabra misterio.
Ya lo paga el ministerio
y lo pintan los analfabetos
en tonos neón.
No se sentará Hercules Poirot,
de eso estoy segura.
Pero, gracias a Dios,
el tren va demasiado rápido
y el fantasma, la niebla
y el misterio
no serán capaces nunca
de alcanzarme dentro de la
contemporaneidad
de mi Ipod.
Ya no.

3 comentarios:

  1. Adicción, adicción...que mala es la adicción.
    cuando no es de besos, es de abrazos.
    cuando no es de luna, es de sol.
    cuando no es de música...
    No ! Imposible !
    Si la música no es tu adicción
    no merece llamarse pasión !
    Por esas personas que no pueden vivir sin música...
    P.D
    No me pidas algo más currado a las 3:30 de la mañana xD

    ResponderEliminar
  2. Qué haces conectada a esas horas intempestivas!
    Pues no es por adicción ni pasión. Quiero decir, que no es que use la música para evadirme, para encontrarme, para amar o para odiar. El día en que la música es todo para tí no puedes decir que te sirva para nada en concreto. Simplemente fluye en mi vida. Está ahí.

    ResponderEliminar
  3. :$ Ya...bueno...robé el USB de mi hermana y me conecte toda la noche (hasta las 5). razones:
    1: Leer lo que mi escritora favorita publica a las tantas de la noche :D
    2: Descargarme y leer cada uno de los 17 capítulos que tiene Strawberry Shake Sweet (Maga)- si, lo sé, soy una viciosa cuando me gusta algo...pero es que es tan divertido xD
    Humm... Música...
    Interesante sea pues, que te acompañe en tu vida cotidiana, como parte de uno mismo.

    ResponderEliminar