viernes, 22 de noviembre de 2013

Eran lo suficientemente valientes para afrontarlo

Nos cae muy bien la gente muerta.
Y mucho mejor los suicidas.


Pasan las horas y aún no hemos muerto. Seguimos crepitando. Seguimos aferrándonos al suelo y al amor. A las cosas que merecen ser vividas. A las entrañas y la pasión y los cafés y el otoño y el sudor suyo de él y a las mascotas y a las faldas bonitas y a las risas sin contención y a las vejigas sin continencia y a los sueños imposibles y a las tardes azules y a las joyas brillantes y a sus ojos en los míos y a su torso desnudo y a las frutas maduras y a las arrugas enternecedoras y a las mejillas rosas de mi abuela y al olor a hogar que no es hogar y al refugio de su brazo y a la lluvia con gusto y a las cervezas de los amigos y a las manos bonitas y a mis padres que me dieron la vida y a la poesía metafórica y a la música clásica sesgada y su fuego y a mi agua.

Yo no soy tan valiente, no.
Yo me niego a ver el cáncer de vejiga y el cáncer de colon y el cáncer de pulmón y la metástasis en hígado y los TACs médicos y las pensiones pobres y la pobreza enmascarada y el techo de cristal y la esclavitud del siglo XXI y las manos que duelen y mi cuerpo triste y las palabras que no se dijeron y el agua sin sabor y la carne y la carne y la carne y la carne y el alimento que es tragedia y los hijos que no tengo y la verdad absurda y los hombres que muerden y la saliva seca y el  útero seco y la vagina seca y los labios secos y la muerte deseada y su mirada ausente y los tatuajes silenciados y los cuerpos vacíos y a la memoria robada y las mentes podridas y la fruta amarga y los dientes amarillos y el aire que falta y sus dudas temporales y mi falta de mí en mí y la madre que no me quiere y la abuela que llora y la soledad de la música y las noches sangrantes y las alas de fuego y el padre que me olvida y el dinero que apesta y la ciudad que ulula y el bosque sin sal y los besos marchitos y las uñas blancas y el veneno en botella y las palabras que apuñalan y los penes sin vida y mi no ser mujer y mi ser mujer y mi no trabajo y mi no futuro y la carne y la carne y mis asesinatos.